V Invasion Extraterrestre

Cuando a principios de los años ´50 la televisión dejó de ser un experimento y se convirtió verdaderamente en un medio de comunicación masivo, los productores se dieron cuenta que si abandonaban el teatro televisado y lo sustituían por seriales el publico aumentaría ya que la audiencia esperaba la continuación y con el paso de los capítulos se sumaban nuevos adeptos.
Con el inicio de los seriales se hicieron presentes, además de los vaqueros y superhéroes, los extraterrestres. Si bien los primeros tenían un rol fijo, por decirlo de alguna manera, el matar villanos o salvar a la humanidad, la incursión de los extraterrestres fue distinta.
Es decir que estos venían de otros mundos con el fin de destruir algo del nuestro. Los alienígenas entraron en la pantalla chica para ocupar un rol: Hacer referencia metafórica a algo o a alguien.
En definitiva fueron (y son) una metáfora. Decimos alienígenas cuando queremos decir comunistas, gobierno o nazismo.
En la pantalla pudimos ver como la "metáfora extraterrestre" era utilizada en el cine de los ´50 para referirse a la supuesta infiltración comunista (Invasion of the Body Snatcher, por ejemplo). Y en los ´90, luego de la caída del muro de Berlín, eran utilizados en los X-Files como una imagen de los abusos gubernamentales.
Finalmente V, la muy clásica miniserie de los 80, surgió cuando Kenneth Johnson, en una reunión con importantes cadenas de TV propuso hacer una miniserie basada en la resistencia francesa durante la invasión nazi en la segunda guerra mundial. Los empresarios no se mostraron muy interesados, por lo que Johnson decidió hacer un giro sorpresivo diciendo "La diferencia es que estos Nazis son del espacio exterior". El productor ya famoso por sus trabajos en "El Increíble Hulk" y "La Mujer Biónica" fue contratado de inmediato para realizar la miniserie en cuestión.
"La diferencia es que estos Nazis son del espacio exterior" dijo el productor Kennet Johnson, dejando en claro que los Invasores iban a ser una representación sin sutilezas de la ocupación nazi.
Johnson vio con esta propuesta la posibilidad de trasladar a la pantalla chica el tema del Holocausto; el cómo el común de la gente había servido de base para los fascistas y sus crecientes movimientos. Trató de mostrar con V como reaccionarían los americanos si un ejercito de fascistas vinieran y dijeran "nosotros estamos aquí para protegerlos de los imperialistas, son ustedes personas afortunadas"
V fue una referencia velada a El Diario de Ana Frank, en la que una sociedad entera era conquistada con respuestas fáciles por un movimiento dinámico y poderoso (claro que en la serie venidos de otro planeta), que se daba cuenta demasiado tarde que ese movimiento significaba su propia destrucción.
V comienza con la llegada de unas 50 naves madres a la Tierra estacionándose sobre las ciudades más importantes, la tripulación de esos platos se identifica como Los Visitantes que a simple vista parecen humanos.
Los Visitantes ofrecen a los terrícolas conocimientos tecnológicos y biológicos a cambio de minerales vitales que ellos necesitan; las personas aceptan y los visitantes comienzan a aumentar su presencia.
En principio la invasión es gradual: Los alienígenas condenan al ostracismo a científicos que signifiquen una amenaza para sí y se los culpa de ser la fuente más grande de los problemas de la Tierra. Al mismo tiempo los cuerpos de Juventud de Los Visitantes se dedican a reclutar humanos en sus líneas y descubrir quienes están en su contra.
Las similitudes con el nazismo en la serie saltan a la vista: desde los soldados uniformados, el control total de los medios de comunicación, la utilización de carteles propagandísticos donde se puede observar símbolos semejantes a las esvásticas el avance de grupos semejantes a las "Juventudes Hitlerianas".
Al tiempo se descubre la verdad. Los invasores no son tan humanos como parecen. En realidad son una especie de lagartos que utilizan unas máscaras especiales para parecerse a nosotros. Por otro lado su verdadero objetivo no son esos minerales sino toda la humanidad. El problema que tienen es que su planeta se quedó sin recursos y necesitan alimentos para llevarse a la olla.
Los humanos parecen ser un bocado ideal para estos lagartos por lo que se decide congelarlos y llevarlos en sus enormes naves.
Kennet Johnson dice que "el corazón de la serie es el elemento humano, lo que muestra V es como cambian las relaciones de las personas y como reaccionan". "¿Cómo reaccionaria usted ante un ejército de ocupación? ¿Y si su hijo se vuelve un miembro de la organización de la Juventud?" - se pregunta el realizador. "Cuando el tiempo pasa, los padres tienen que cuidarse mucho con lo que dicen en su propia casa por que el hijo esta ahí y los dichos podrían involucrar a otras personas". "Al igual que en la 2º guerra mundial, mucha gente dice - Yo no soy judío. O - Esto pasará, es momentáneo. O nos volvemos colaboradores. Y ahí hay un grupo de personas que dicen - ¡No!. Esto esta mal. Nosotros vamos a combatirlo- Y ellos se convierten en la resistencia" comenta Johnson.
Esta resistencia, liderada por el camarógrafo Mike Donovan, luchará para impedir que los aliens lleven a cabo sus planes. El símbolo de estos es una V, de victoria, que pintan por las calles.
Originalmente V salió al aire entre 1983 y 1985 y constó de 2 miniseries, la primera (V) de 2 capítulos de 110 minutos y la segunda (The Final Battle) de 4 episodios de 110 minutos, aunque en varios países se subdividió en episodios de una hora y se emitió como si fuera una única miniserie de 12 capítulos. Posteriormente se hizo una serie regular (V: The Series) de 19 capítulos de 60 minutos.
A pesar de lo dicho por la NBC y la Warner Bros. que criticaron duramente a Kennet Johnson por la considerable suma que gasto por la primera serie (se hablo de 50 millones de dólares), éste les tapo la boca a ambos con la cantidad de televidentes: luego de ser estrenada en mayo de 1983 el publico que la siguió fue de unos 65 millones de espectadores sólo en los EE.UU.
Esto obviamente termino en la producción de la segunda miniserie V: The Final Battle, donde los visitantes son derrotados y expulsados.
"Las primeras miniseries tenían una dignidad intelectual" explica el actor Marc Singer (Donovan en V) "no era simplemente una serie de acción y aventura, había algo mas de fondo. Era bastante poderoso, había que estar bien atento para entender las implicaciones de largo alcance que pretendía Johnson. Yo recién logre comprender todas las implicancias luego de ver lo que se había hecho tras largos meses de trabajo" concluye el actor.
"Después del éxito de las dos miniseries NBC quería hacer algo mas, y yo le propuse al entonces presidente Brandon Tartikoff que me dé un par de horas de la noche del domingo y a cambio le daba una saga de 2 horas continuadas. En principio él dijo que no, pero luego cuando nosotros (los productores) pusimos mas dinero, NBC termino pidiendo la continuación" explicó Johnson.

Durante el verano de 1983 Johnson en colaboración de Craig Buck, Peggy Goldman y Diane Frolov comenzaron con el guión de lo que sería la segunda miniserie "The Final Battle". "Probablemente era el verano más exigente de mi vida" sostiene Buck "Los 4 nos sentábamos en un cuarto durante horas a analizar la primera serie para darle forma a, lo que yo creía iban a ser, las 6 horas más asombrosas de la TV".
Pero no fueron tan bien las cosas como el equipo las planeaba, la Warner decidió recortar 5 millones en el presupuesto; "mi sensación fue que no podía cumplir con lo que nos pedían con tan poco dinero y tan poco tiempo (la querían para mayo de 1984)", así que cuando el grupo trato de volver a hablar sobre el presupuesto "se libraron descortésmente de nosotros y se trajeron un nuevo equipo para hacer una versión más barata" cuenta Buck.
Así aparecen los productores Daniel Blatt y Robert Singer con Richard Heffron como director, quienes se hicieron cargo de este proyecto. "Nosotros teníamos el tiempo en contra, teníamos poco tiempo para entregar el producto" dice Heffron; entonces recurrieron a un amigo Brian Taggert "que es muy bueno y rápido. Nos sentamos Dan Blatt, Brian y yo durante dos frenéticos días para ver como hacíamos para liberarnos de esos 5 millones que no tendríamos nunca. Lo primero que hicimos fue limitar el numero de efectos especiales y se recuperaron todas las piezas aprovechables de la serie original".
Lo que salió fue una miniserie mas convencional, donde el tema del nazismo quedaba un poco relegado dándole paso a la acción pura.
Si bien los televidentes disfrutaron la nueva miniserie (tal vez no de la misma manera) los productores anteriores no quedaron conformes ni un poquito al ver como desvirtuaron su producto "realmente pienso que esas personas no entendieron lo que era V. Mi sensación fue que intentaron poner en 6 horas de TV toda la acción y efectos especiales que entraran dentro de su presupuesto. En V usted no solo veía una situación, sino toda una sociedad; en lo que ellos hicieron todo esto se perdió, fueron por los efectos en lugar de la historia", comentaba Craig Buck.
Los 19 capítulos de The Series tampoco retomaron la línea original. Kenneth Johnson aseguro que "fue todo demasiado malo, Brandon Tartikoff me dijo - Kenny, nosotros deberíamos haber hecho lo que usted nos dijo, entonces V hubiera durado 5 años -"
V : The Series sólo duró una temporada. Tal vez porque a diferencia de las primeras, esta fue una serie totalmente pasatista, donde no importaba tanto el contenido. Además la serie regular tuvo un menor presupuesto que se notó, sobre todo, en los efectos especiales.
En los ´90 la Warner intentó hacer un nuevo capítulo de la saga, pero no logro el apoyo de sus emisoras asociadas y abandonó el proyecto.

Para todos aquellos que disfrutaron con la serie ochentística por excelencia (los peinados lo dicen todo), V es una serie (o un grupo de series, mejor dicho) donde se pudieron ver muchísimas aventuras y algunas escenas imperdibles como la de Diana abriendo inconmensurablemente la boca para tragarse una rata entera (se tuvo que hacer una cabeza mecánica para sustituir a la de la actriz Jane Badler) o la de las Naves Madres estacionándose sobre las principales ciudades del mundo (en Día de la Independencia tuvimos un deja vu).
Seguramente si viéramos nuevamente todos los capítulos la encontraríamos un tanto obvia. Pero merced a nuestra fallida memoria todavía es posible catalogarla entre nuestras favoritas.

Extraido de:http://www.quintadimension.com/modules.php?name=News&file=print&sid=117